"Regulation without frontiers" es el titular de un artículo del jueves de The Economist. En él se recoge la intención de la UE de aplicar las restrictivas directivas sobre TV a cualquier otro medio que se le parezca (videostreaming, videoblogs...). Regular y controlar todo es su obsesión. Una vez más, tanto las instituciones y nuestros representantes, como las grandes cadenas de TV no quieren ver la realidad cambiante de nuestro mundo y se empeñan en mantener a todo trance sus caducas líneas de negocio. Como las suciedades de gestión y las discográficas, "igualico, igualico que el defunto de su agüelico". Dios los cría (perdón d'Erlette) y ellos se juntan.

Lo explica mucho mejor el artículo de The Economist (inglés) o Enrique Dans (español).